Esta sombra de duda.
Estos pasos perdidos
hacia ninguna parte.
Este herir continuo.
Este caminar oculto
que no encuentra
a quien busca encontrarle.
Esta incapacidad
de soltar las palomas
del pecho.
Este vano intento
de poner las palabras precisas.
Esta eterna lágrima en el vientre.
Ese confundir absurdo
ante todo lo inmenso.
Esta pequeñez maquiavélica
postrada frente a mis rodillas.
Este orgullo quebrado.
Esta piel que se eriza.
Este incurrir del miedo
que morirá sin remedio
postrado en los algodones
ardientes de tu pecho.
Maravilla Fer!! me encanta!
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